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Historia de la cerveza
La cerveza es una de las bebidas alcohólicas más antiguas. Los primeros indicios de la existencia aparecen en 4000 años antes de J.-C en Mesopotamia. Tablas de arcilla indican la presencia de una bebida fermentada producida con granos, el Sikaru. Esta bebida muy apreciada ha sido objeto de diferentes creencias a lo largo de la historia. ¿Quieres conocer la historia de la cerveza?
Historia de la cerveza en el Antiguo Egipto
En el antiguo Egipto, la «cerveza» era una bebida divina. Según la leyenda, el dios Osiris habría olvidado el sol una decocción de cebada mezclada con agua sagrada del Nilo, creando el «vino de cebada». La cerveza era preparada por las mujeres y servida por sacerdotisas. La divina bebida es cada vez más apreciada y sus usos terapéuticos se multiplican. La cerveza también es tomada como bebida bienvenida, como alimento hasta que se convirtió en una moneda de cambio.
Edad Antigua
En la antigua Grecia, la cerveza es reconocida por sus propiedades medicinales. Pero los griegos y romanos, amantes del vino, tienen poco interés por la cerveza. Para los galos, la cerveza o Cervisia (Cervoise en honor de Ceres, la diosa de la cosecha) es una poción mágica.
Los galos son también los inventores del barril que sirve para controlar mejor la fermentación y almacenar las cerveza. La receta se parece sospechosamente a la que conocemos hoy en día, pero la cerveza era aromatizada (miel, especias y hierbas aromáticas).
Edad Media
Este es el siglo XII que el lúpulo, planta conocida por sus propiedades antisépticas, hizo su aparición en la producción de cerveza y le confirió ese delicioso amargor.
La producción se convierte en un arte particularmente sutil y a este juego los monjes se mostrarán expertos. Algunos nombres de abadías cruzarán los siglos. A lo largo de la Edad Media, la cerveza irá expandiéndose principalmente en el norte, en los pueblos anglosajones.
La bebida religiosamente fermentada conocerá muchos seguidores entre los germanos y son ellos los que le darán su nombre actual: «Bier», que se convertirá en «cerveza». Carlomagno, por cuestiones de calidad confiere el monopolio de la fabricación de la cerveza a los monjes. Del IX hasta el siglo XIV, la cerveza fue producida principalmente por los monjes. Los laicos que querían participan en esta práctica tenían que pagar un impuesto: el derecho a Gruyt que pagaban a los monjes.
Historia de la cerveza en el Renacimiento
En Francia, la producción de cerveza es codificada, regulada y fiscalizada, el estatus de los cerveceros de París se define en 1489 y el término «cerveza» es utilizado. La cerveza únicamente puede hacerse por maestros cerveceros y con los siguientes ingredientes: granos, agua y lúpulo.
La revolución industrial
Tradicionalmente la cerveza es un producto inestable y frágil y la fermentación sigue siendo un fenómeno misterioso y divino. En 1854, Pasteur se interesa por la química de la fermentación y descubre la existencia de microorganismos en la levadura. La investigación científica sobre los microorganismos ayudará a controlar el proceso de fermentación y mejorará las condiciones de salud de las fábricas de cerveza para producir una bebida más saludable y más clara.
Los tiempos modernos
Para los fabricantes de cerveza y amantes de la cerveza, ¡es una revolución! Esta bebida frágil puede ser ahora almacenada y consumida lejos de su lugar de fabricación. El desarrollo del vidrio, aparatos de filtrado, envasado y refrigeración mejoran la calidad y la producción.
Las cervecerías trabajan ahora en cualquier época del año, independientemente de las inclemencias del tiempo. El fruto de las fábricas de cerveza se ha extendido en Europa.
De nuestros días
El sabor de la cerveza se ha convertido en más suave y atrae a una nueva clientela. La elaboración y la distribución de la cerveza se hace a una escala mayor. Es así como llegamos a la cerveza de hoy, una cerveza con gustos variados y que se consume en todos los rincones del mundo.
La producción de cerveza está ahora casi totalmente automatizada en la mayor parte de sus operaciones de fabricación y el número de cervecerías tradicionales está disminuyendo. Las nuevas tecnologías y la investigación permiten obtener un producto de muy buena calidad. Esta es la historia de la cerveza, espero que la hayas disfrutado.